Foto:Erik Peterson
Javier Zamora es uno de los jóvenes poetas salvadoreños que mejor representa a las voces de la diáspora. A través de un estilo conversacional y un lenguaje poético que se apoya en el humor sardónico, nos entrega el relato necesario del emigrante, las fotografías críticas y agudas de las políticas exteriores y un retrato ácido de la idiosincrasia estadounidense, claro, sin olvidarse de dialogar con la rota imagen de su país de origen. Zamora se vale de las múltiples referencias a elementos considerados propios de la salvadoreñidad y de un juego inteligente del idioma inglés en confrontación y/o simbiosis con el idioma español con altas intenciones paródicas que le permiten construir su gran discurso.
Presentación de Josué Andrés Moz
10 de junio, 1999
Fragmento
yo no nací aquí
siempre he sabido que este país me quiere muerto
me creés cuando digo que más de una vez
un gringo me ha querido muerto
un gringo aprobó una ley que me quiere deportado
quiere que mi familia sea deportada
un gringo un gringo un gringo
no es la canción que quería escuchar
al manejar al aeropuerto hoy
el camino los árboles las señales el cielo los carros los muros las luces
me dijeron te queremos
fuera fuera fuera fuera
En un callejón afuera de Oaxaca
El mexicano nunca nos dijo cuánto nos íbamos a tardar.
¿Cuánto? No tanto. ¿Cuánto va costar?
Ni tanto. Nunca dijo que nos íbamos a esconder
en el furgón como palillos de fósforos.
En nuestro cantón, nunca habíamos conocido a un mexicano
aparte de las mujeres y hombres en las novelas,
así que solo podíamos imaginar: saltándonos el muro,
dar una mini-corrida a un tráiler
estacionado en el McDonald’s de San Ysidro.
No tanto, no tanto en absoluto. En Oaxaca,
un pequeño tenguereche lame horchata de mi mano—
nos hacemos cheros, nos damos nombres.
Hola Paula. Hola Javier, me dice.
Pretendemos ver el muro, dar una mini-corrida, meternos a un tráiler…
¿Cuánto? No tanto. En el suelo, nuestras rodillas
les rinden todo el pisto a los policías
apuntándonos con las miras y cañones de sus metralletas.
Nunca habíamos conocido a un mexicano
aparte de Chente y Chavela Vargas. Estamos tumbados
en el suelo como chuchos dando chiche a su criada,
no es primavera, y donde vamos si hay primavera,
decimos va estar bien, todo va estar a lo máximo—
mis manos continúan a jugar con Paula.
El muelle de La Herradura
Cuando duermo, veo a un cipote
entre las piernas de un hombre cicatrizado:
sus espaldas, peladas por el sol, sudan un sudor
heladísimo. El cipote me mira,
y la paja del techo del muelle se traga a la luna
que está dividida por nubes negras.
Por en veces, los dos están en el mismito techo,
pero tienen pañuelos rojos
y militares los rodean. Confundo a casquillos
por picos de cormoranes que se clavan
y se clavan hasta que el agua se tiñe
un color como el de los atardeceres.
En uno de esos sueños, escucho al hombre—
vivo y todavía en el techo—decir
hoy vienen por mí, mañana por vos.
Hay una aldea donde a los cormoranes
los entrenan para pescar: un lado de la soga
amarrada a la lancha, el otro
al pescuezo, para que no se traguen
a los pescados que van a atrapar.
Mi papá es uno de ellos. Él es
el hombre traumatizado.
Desaparecido
Suponé que te arrastran a un callejón donde el polvo es playa. Por horas no podés encontrar un lugar en qué pararte sin ignorar las estrellas enfermas. Allí, una voz despelleja con fórceps. No sabés cómo tu pelo memorizó fosas. La voz está hecha de invasión y dice ¿Cerote y vos cómo borraste las líneas en la arena? Tu cara chisporrotea como las olas. El peso de cuerpos vestidos en el uniforme de preguntas. Cangrejos azules engrapan tu voz a la noche y tus manos ya no son tuyas. Suelto, solo podés decir no hay suficiente arena donde los cangrejos azules se hartan mi sueño.
Estos nombres son responsables: ARENA, Roberto D’Aubuisson, Escuadrón de la Muerte, Las Fuerzas Armadas, La Guardia Civil, Batallón Atlacatl, Escuela de las Américas (también conocida como: Fort Benning o Western Hemisphere Institute for Security Cooperation), Batallón Díaz Arce, Bush Sr., Ronald Reagan, Alliance for Progress, US AID, CIA, Jimmy Carter, las catorce familias…
La Globalization Muy Good Mucho Dollares
al descubrir que las nutrias duermen agarradas de la mano que cute
muy adorables El Gobierno necesitaba una pregunta de investigación
para comprender el «Free Market» Científicos demandaron mucho dollares
para contestar pero por qué las nutrias duermen así Neo-Liberales
aprobaron una reducción al presupuesto Socialistas organizaron un paro
para salvar el muy sad bosque de manglares miles emigraron al norte
cientos al sur solo el presidente había estudiado donde muchos bosques de algas
marinas muchos erizos de mar así que por eso mucho love a las nutrias
de parte del presidente quien era primo con dos diputados muchas fortunes
ustedes son very good primos uno le dijo al otro vamos a decir que estamos muy preocupados con lo del global warming introduzcamos un animal menos danger
a nuestros esteros muchos aplausos nivel de aprobación más alto
para el presidente un boom a la bolsa de valores después que firmaron la ley #muchodollares #desfiledenutrias muchas carrozas bastante gente
medio desnudas trabajando confeti globos mucha basura muchos
pisoteados noticias de última hora muy sad mucho bad
Javier Zamora. La Herradura, 1990. Poeta salvadoreño quien a muy corta edad emigró solo hacia Estados Unidos y quien a partir de una visión de contrapunteo ha logrado construir una sólida voz poética que permite al lector acceder al necesario testimonio de la diáspora. Javier Zamora es autor de Unaccompanied, poemario publicado en 2017 por Copper Canyon Press, mismo libro que para el año 2020 promete estar disponible en idioma español y su poesía forma parte de diversas revistas literarias y antologías. Zamora posee una maestría en Bellas Artes por la New York University y fue becario Wallace Stegner 2016-2018 en Stanford University. Así mismo, fue becado por la National Endowment for the Arts, Poetry Foundation y CantoMundo, entre muchas otras, también es fundador de la campaña UndocuPoets y miembro de la campaña Our Parents’ Bones. Actualmente es becario del Radcliffe Institute for Advanced Study, ubicado en Harvard.