Raúl Gómez Jattin, hijo del tiempo

Imagen: Daniela Gaviria, Literariedad.

Para Raúl Gómez Jattin (*) el tiempo era regreso al vientre materno, precipitación en la locura o certeza irremediable de la muerte. En nuestra edición de enero-febrero de 2022: Tiempo y circularidad, queremos rendirle un homenaje con esta selección de poemas al autor de Hijos del tiempo.

 

Memoria

Más allá de la muerte y sus desolaciones
que perviven intactas como la vida misma
hay un sol habitado de palomas y árboles
que guarda tu futuro en mitad de mi infancia
Joaquín Pablo mi viejo niño y amable
la edad nos confundió y nos separó dolidos
en mañanas de Mayo esperando la lluvia
y en las horas del brillo y las escaramuzas
de los gallos de riña entre los matorrales
Hay un silencio grave parecido al olvido
que me nubla mis ojos y quiebra mi garganta
en tus voces que guardo como una tibio sábana
para el frío de los años y la soledad cansada
Eras el último hombre honrado que sobrevivía alegre
Eras aquel sentido sembrador de amorosas pasiones
En mitad de la vida se me escapó tu cuerpo
Como un frutal cargado soleado y cuidadoso
que me heredó sus mangos en lo más débil del alma

 

 

***

El tiempo nos depara un vago entresuelo
entre un piso oscuro y otro piso muerto
El piso de abajo vive en el recuerdo
en ese laberinto que tejieron tus hechos
Sostiene el anzuelo de un mejor futuro
que se asoma a veces a nuestro presente
queriendo ser carne para nuestro ayuno
Vive en tu entresuelo, regresar no puedes
a tu piso muerto donde la niñez
vive en el subsuelo —iluminado— mágico
ese piso oscuro que a cada sol asoma
con una promesa de vida ilusoria

 


Lola Jattin

Más allá de la noche que titila en la infancia
Más allá incluso de mi primer recuerdo
Está Lola – mi madre – frente a un escaparate
empolvándose el rostro y arreglándose el pelo
Tiene ya treinta años de ser hermosa y fuerte
y está enamorada de Joaquín Pablo – mi viejo
– No sabe que en su vientre me oculto para cuando
necesite su fuerte vida la fuerza de la mía
Más allá de estas lágrimas que corren en mi cara
de su dolor inmenso como una puñalada
está Lola – la muerta – aún vibrante y viva
sentada en un balcón mirando los luceros
cuando la brisa de la ciénaga le desarregla
el pelo y ella se lo vuelve a peinar
con algo de pereza y placer concertados
Más allá de este instante que pasó y que no vuelve
estoy oculto yo en el fluir de un tiempo
que me lleva muy lejos y que ahora presiento
Más allá de este verso que me mata en secreto
está la vejez – la muerte – el tiempo
inacabable cuando los dos recuerdos: el de mi madre y el mío
sean sólo un recuerdo solo: este verso.

 

 

Micerino

La barca de oro navega lenta entre nenúfares
y los danzarines nubios tratan de alegrarlo
mas el faraón tiene la imaginación absorta
en presentimientos sombríos y no los mira
Su alma filtra casi todo lo externo
y sólo escucha el chapoteo de los remos
y sólo ve los ibis que vuelan sobre el río
La pirámide está casi terminada
y su truncada cima se divisa a lo lejos
Allí reposará la momia embalsamada
de Micerino que ahora sonríe distraído
a su hermana y esposa la faraona de los tres Egiptos
Se ha hecho leer el Libros de los Muertos
Ha consultado oráculos y premoniciones
de los sacerdotes de Osiris de Isis y de Toth
y estos lo favorecen con muchos años de vida
Pero la construcción es piedra a piedra
y parece que la tumba no avanzara
¿Alcanzaré – se pregunta Micerino – a morir a tiempo?

 


Scherezada

Está enamorada del asesino que la obliga
noche tras noche a exprimir su memoria
de la ancestral leyenda multiforme y extensa
para salvar por un momento su indefensa vida
Y mientras cuenta y cuenta Scherezada
el Califa la besa y acaricia lujurioso
y ella tiene que seguir entreteniéndolo contando
porque el verdugo espera en cada madrugada
Está a merced de quien la oye emocionado
pero no levanta la sentencia a muerte
El artista tiene siempre un mortal enemigo
que lo extenúa en su trabajo interminable
y que cada noche lo perdona y lo ama: él mismo.

 

 

(*) Raúl Gómez Jattin. Poeta (Cartagena de Indias, Colombia, 1945-1977). Autor de los libros, Poemas, Tríptico Cereteano, Hijos del tiempo, El esplendor de la mariposa y El libro de la locura.

Literariedad

Asumimos la literatura y el arte como caminos, lugares de encuentro y desencuentro. #ApuntesDeCaminante. ISSN: 2462-893X.

Deja un comentario